Como cualquier jugador sabe, se puede ganar con malas cartas y perder con buenas o lo que es igual que quien juega es el jugador, no las cartas. Claro, que en la vida, como en el juego, es más fácil culpar al destino, el azar o la suerte, que a nosotros mismos.
Hay quien no sabe a que juega, incluso que no sabe que juega, hay quien juega al mus, al poker, al tute, al mentiroso o al strip poker…y no sabe que da igual el juego, lo importante es que tu eres el que juega. Como tu seas te saldrá la partida, no como sean las cartas.
Hay quien no sabe a que juega, incluso que no sabe que juega, hay quien juega al mus, al poker, al tute, al mentiroso o al strip poker…y no sabe que da igual el juego, lo importante es que tu eres el que juega. Como tu seas te saldrá la partida, no como sean las cartas.
Ufff!!! A veces, al darte cuenta de que tienes la mejor de las manos que hayas tenido jamás, te tiemblan cuerpo y alma y te preguntas si la vas a jugar bien.
ResponderEliminarP.D. ¿Cuando has jugado tú a las cartas con William? ;-)
No te lo preguntes, juega, es lo que hacen los buenos jugadores.
ResponderEliminarP.D. He jugado con las gentes mas extrañas a los juegos mas perversos, pequeño saltamontes....
uyuyuy
ResponderEliminarCoincido en que es el jugador quien hace al juego... mas también creo que las cartas que nos sean dadas influyen muchísimo sobre el resultado del juego. Y en la vida, como bien dices, muchas veces no sabemos ni qué juego estamos jugando! Un abrazo desde Argentina!
ResponderEliminarPD: Si me lo permites, y cuando así me lo digas, me gustaría tenerte linkeado en mi blog.
uyuyuy? jajja debo estar torpe hoy (¿solo hoy?) no entiendo...
ResponderEliminarUn placer Jean, claro que las cartas influyen, pero solo si son bien jugadas.
ResponderEliminarPuedes linkearme, me hace ilusión.
Un abrazo