jueves, 22 de febrero de 2024

PERDER EL TIEMPO

 

Podría escribir miles de páginas sobre esto, pero tal vez le haría demasiado honor al título. Así que podré cuatro cosillas y au.

Preocuparse por viejos errores. Está bien equivocarse en la vida  (en realidad no), es una faena pero es inevitable, así es como  se vuelve uno más sabio (dicen). Sin prisa, las grandes cosas toman tiempo, y se están logrando. Los errores deberían ser motivación, no  excusas. Los pequeños errores y frustraciones de ayer no se interpondrán en el camino hoy.

Preocuparnos por lo que todos piensan y dicen de nosotros. Nada es personal, aunque lo parezca. La gente hace las cosas por ellos mismos, aunque no lo parezca. No se puede cambiar la forma en que las personas te tratan o lo que dicen de ti. Todo lo que se puede hacer es cambiar la forma en que se reacciona  y con quién se elige estar, una de las cosas más liberadoras que aprendemos en la vida es que no nos tiene que gustar todo el mundo y no hay que gustarle a todo el mundo, y eso está perfectamente bien. No importa cómo vivas, alguien se sentirá decepcionado, así que vive tu verdad y asegúrate de que tú no seas el que se decepcione al final.

Autoengaño. La vida mejorará sólo cuando se tomen pequeños riesgos. Y se puede empezar por lo más difícil ser honesto con uno mismo.

Resentimiento. La bondad no debe confundirse con debilidad, ni el perdón con aceptación. Se trata de saber que el resentimiento no está en el camino hacia la felicidad a largo plazo.

Pensamientos y gestos de odio. Trata a todos con amabilidad y respeto, incluso a aquellos que son groseros contigo, sino porque tú eres amable. ¡Y hazlo por ti también! Lo que va, vuelve o no, más nadie se ha hecho fuerte mostrando lo pequeño que es otro.

Tratando controlar lo incontrolable. No se puede calmar la tormenta. Lo que sí se puede hacer es calmarse uno, y la tormenta eventualmente pasará. Los cambios más poderosos y prácticos ocurren cuando se decide tomar el control de aquello sobre lo que uno tiene poder, en lugar de anhelar el control sobre lo que no lo tiene.

Conozco más formas de perder el tiempo, mis conocimientos del asunto son enciclopédicos y mi experiencia es vasta y basta. 

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