martes, 6 de abril de 2010

Porque nada hay secreto que no llegue a descubrirse ni nada oculto que no llegue a conocerse. Mateo 10

No estoy muy inspirado últimamente, serán los nervios del regreso, será que llevo mucho tiempo fuera o será mi estúpido sentido de la lealtad a lo que me cuentan. Porque últimamente me siguen contando cosas que quizá, no deberían.
La primavera, la ausencia, el vértigo del retorno y las correspondientes celebraciones sueltan la boca del personal, mantengo la obligada reserva, pero hay una cosa que me dejó un poco fuera de juego. En ese momento de confesiones inconfesables, trascendentales reflexiones intrascendentes, y emociones a flor de piel, cuando ya casi no es ni tarde, se produjo la siguiente conversación entre una compi de copas y este que relata:

- Cada uno tenemos nuestros propios fantasmas. (póngase ese puntito de voz entre ronco y pastoso que dan las copas)

Me dice ella con los ojos ya desenfocaditos, yo queriendo despejar a corner, sin pensar mucho (ya no aguanto el alcohol como antes)
.
- Por eso dios inventó la Ginebra.

Ella, intentando enfocar sus ojos en los mios

- Y un cabrón como tu el Gin-Tonic.


A la mañana siguiente, un rato después en realidad, las gafas mas oscuras fracasando en un día luminoso, la prensa dando por saco. Y mi dolor de cabeza y yo pensando que me habían echado un piropo, o no.





PS. El Gin&Tonic no lo inventé yo, aunque se me da bien, lo hicieron hace siglo y medio los colegas ingleses en la India (que tampoco eran cabrones ni ná)

8 comentarios:

  1. ¿Y esa cita tan seria y tan apropiada en estas recientes fechas con una entrada tan pagana?

    Sí, lo se, da mucho juego, pero...

    (Tómese con tono de tirón de orejas, jejeje)

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  2. Gusanito ya me conoces, o deberias, no es la primera vez que uso de los evangelios para ilustrar sucesos no estrictamente religiosos, que tampoco paganos.

    El amigo Mateo si que da juego si...

    (tomese como colleja ligeramente liftada y con mucho hielo claro.)

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  3. Pues tú mismo, que de tonto no tienes un pelo.

    Depende del carácter de la mujer que te lo dijera puede ser un piropo supino, o casi un insulto (aunque el contexto físico lo desmienta.)
    Mujer conservadora, a la que atrae el supuesto peligro por un rato, pero no lo quiere en su vida y ha elegido la gaseosa, que no se sube a la cabeza.

    Por cierto, hablando estrictamente de alcohol: Yo soy de Agua de Escocia, pero cuando entra la caló malagueña no le hago ascos a un Bombay Sapphire con Schweppes, medio limón exprimido y en una buena copa de balón.

    Excentricidades de tabernera convencida.

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  4. Sin duda un piropo, es mucho más fácil neutralizar los fantasmas que te hacen enfermar endulzando la quinina, y saber las dosis adecuadas y decir lo justo una composición astuta de 60º que desmantela resistencias.

    Me alegra que tu trabajo haya concluido y vuelvas a casa.
    Besos.

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  5. Fiebre, esas alturas del partido (partido de copa, sin duda)cuesta distinguier el caracter propio, el ajeno ni te cuento, pero si, mas o menos lo que dices.

    Bien por la copa balón, el limón muy medido que se puede acbar con las burbujas de la tónica.

    Besos tabernera.

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  6. gaia, eso pienso yo a veces, que fue un piropo, pero no estoy seguro, con las mujeres nunca se está.

    El gin tonic nació para uso medicinal, voy pedir que me los financie el seguro.

    Un beso

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  7. Pues yo digo que es un piropo en toda regla.

    Y gracias a Dios que existe el gin tonic, porque si no a estas alturas de la vida bebería ponche con chocolate(es lo único que me faltaba por probar hasta que felizmente lo encontré a EL),

    Bienvenido al hogar

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  8. Cactus, ¡ponche con chocolate! Dios nos asista!! Ese tipo de bebidas debe estar prohibido despues de los 16...

    Todavía no he vuelto a casa, pero me falta poquito.

    Un beso

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