ADMINISTRE SU VIDA DE UNA FORMA MAS EFICAZ..

Pese a lo que dice mi jefe en mis calificaciones anuales no soy un administrador tan eficaz, menos de mi vida, menos en verano. Administrar, al fin y al cabo es distribuir ordenadamente una cosa, algo que soy capaz de hacer medianamente bien.

Viene a ser como una partida de ajedrez que jugué hace años, en verano también, con mi vecino Manolo, “el malagueño”, una gran persona y todo un personaje del que aprendí mucho en su día. Yo era un adolescente inseguro (valga la redundancia) y el un ejecutivo agresivo, cuarentón, mundano y jeta, era la primera que jugaba con él, en realidad de las primeras veces que jugaba con alguien que no era mi padre.

Entonces yo ya intuía que jugamos como somos, así él salió al ataque mas descarado, recursos y experiencia contra una defensa catalana cerrada, prudente y temerosa. No soy buen jugador de ajedrez, pero no soy mal competidor y aquello se convirtió en un choque de orgullo testosterónico, cuando tienes mucho miedo este puede bloquearte o estimularte. Nunca he podido resistirme a un reto intelectual, me empleé a fondo y administré de una forma eficaz mis escasas capacidades poniendo al contrincante frente a un muro impenetrable. No fue capaz casi ni de comerme un peón y lo tuve desesperado, mate en un movimiento de mi caballo.

Pero no fui capaz, jugamos como somos, y yo en plenas vacaciones soy un capullo, así que no rematé la faena, tomé una decisión equivocada y perdí la partida de ajedrez que mejor he jugado en mi vida.

El tiempo pasa, pero las tardes de verano, las partidas de ajedrez y las malas decisiones que te cuestan toda la partida (lo que hubieras hecho antes no cuenta) siguen siendo igual. Así que diga lo que diga este güord nuevo, de güindoussiete nuevo, del portátil nuevo, lo de administrar mi vida de una forma mas eficaz no es lo es lo mío.


Menos mal que el petit verdot sigue estando igual de rico