Una cosa es lo que decimos y otra lo que hacemos. Somos lo que hacemos, no lo que decimos. Hay muchas frases de este tipo, hoy quiero ir un poco más lejos, algo así como “una cosa es como decimos que somos y otra como en realidad somos”. Aquí me pide el cuerpo, y mi naturaleza brasas, enrollarme sobre percepciones y demás. Pero solo citaré lo contaminada que está la propia imagen por los deseos o aspiraciones propias, tanto que a veces, en un par de casos concretos, no sé si me engañan o se engañan.
Sabemos que la vida es corta, y que la muerte nos llegará a todos, y sin embargo, nos sorprendemos mucho cuando le sucede a alguien que conocemos.
¡Hay que vivir el momento! No digo que se ignore la muerte, pero tampoco hay que tenerle miedo. Miedo de una vida que no se vive plenamente por miedo de actuar. La muerte no es la mayor pérdida en la vida. La mayor pérdida es sentirse muerto en vida. Así que seamos audaces, valientes... ¡Sentirse morir de miedo y luego seguir adelante de todos modos!
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