Lo
de tropezar dos veces en la misma piedra se supone que nos lo sabemos todo, lo
de que de no bañarse dos veces en la misma agua también. Del dicho al hecho hay
mucho trecho macho ,dicen en mi pueblo y la piedra no es la misma porque está en
el rio de la vida y desde que se tropezó ha seguido viviendo.. en fin y y que
se.
Se puede, se tiene que poder, tener una
historia desgarradora del pasado, sin dejar que nos putee el presente.
Ahora
mismo, en estos tiempos todos tenemos algún tipo de dolor, ira, tristeza,
frustración, decepción, arrepentimiento, etc.
Si
observamos ese dolor que llevamos dentro, de cerca, honestamente, veremos que
es causado por cualquier historia que tenemos
en la cabeza sobre algo que sucedió en el pasado (ya sea en el pasado
reciente o lejano). La mente podría insistir en que el dolor que sentimos es
causado por lo que sucedió (no por la historia que nos hacemos en la cabeza al
respecto), pero lo que sucedió en el pasado no está sucediendo en este momento.
Se acabó. Ha pasado. Pero el dolor sí que está sucediendo en este momento
debido a la historia que inconscientemente nos hemos estado contando sobre ese
incidente pasado.
Hay
que tener en cuenta que "historia" no significa "historia
falsa". Tampoco significa "historia verdadera". La palabra
"historia" en el contexto de autoevaluación no tiene que implicar
verdadero o falso, positivo o negativo, o cualquier otro tipo de juicio
contundente. Es simplemente un proceso que está sucediendo dentro de la cabeza:
Se
está recordando algo que sucedió. Subconscientemente uno se percibe a sí mismo
como una víctima de este incidente.
Este
recuerdo de lo que sucedió causa una fuerte emoción.
Así
que solo observemos qué historia tenemos, sin juzgarla, y sin juzgarse a uno
mismo. Es natural tener una historia; Todos tenemos historias.
La
paz interior comienza en el momento en que hacemos unas respiraciones profundas
y elegimos no permitir que el pasado gobierne pensamientos y emociones
presentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios...